Los nuevos motores Drive-E
Quien haya seguido la evolución histórica de la marca Volvo, seguro que sabe que en la casa siempre se han caracterizado por construir sus coches (desde que el primer modelo de la marca -el Volvo ÖV4– saliera a la calle un lejano 14 de abril de 1927) sobre dos parámetros: constante innovación y permanente seguridad. Y en ello siguen…como lo demuestra el lanzamiento al mercado de su última gama de motores Drive-E.
¿Y qué tienen de nuevo estos nuevos propulsores? Pues que, como sucedía en otros motores anteriores Volvo, en este caso también mantienen una configuración de cuatro cilindros, dos litros de cilindrada y un doble turbo para conseguir, del propulsor, una elevada potencia. Sin embargo, en el caso de los motores Drive-E, Volvo ha añadido un turbo eléctrico que, en lugar de alimentar a los cilindros, se encarga de cargar los dos turbos paralelos. Con este innovador diseño, Volvo consigue retrasar la activación de su turbo… uno de los efectos más característicos de los motores que se sirven de un único turbo. Además, con este turbo eléctrico, el motor consigue alcanzar una potencia máxima de 450 CV, y se convierte, así, en el propulsor más potente de la gama de vehículos Volvo.
Para el desarrollo de este innovador producto, la marca ha contado con la colaboración de algunos de sus proveedores habituales: AVL, Denso y Volvo Polestar Racing. En concreto, en este último caso, el trabajo de Volvo Polestar Racing ha permitido aplicar, al desarrollo de los motores Drive-E, todo un caudal de experiencia y tecnología utilizada (y testada) en los motores de carreras.
Algunas de las ventajas de los motores Drive-E
En comparación con otros propulsores, las pruebas efectuadas sobre los motores Drive-E han demostrado que estos aportan compacidad, bajo peso y potencia. Precisamente estas tres propiedades convierten a los Drive-E, en los propulsores más que aptos para su uso en la alta competición. ya que permiten mejorar la distribución de peso entre los ejes y bajar el centro de gravedad. Cuando todo esto se traslada a los coches de serie, lo que se consigue -entre otras cosas- es una liberación de espacio en el habitáculo del motor y una reducción del peso total del automóvil, lo ya que permite reducir tanto el consumo de combustible como las emisiones de gases. ¿Por qué no te pasas por tu concesionario Tibermotor y pruebas, por ti mismo, las ventajas de los nuevos (e innovadores) motores Drive-E de Volvo?
Pepe Varela